De esto ya hace mucho, mucho tiempo, tanto tiempo que casi todos los que estáis leyendo esto éramos unos críos, tan críos que solíamos bañarnos a lo sumo dos veces por semana y la pasábamos esperando a que llegara el viernes, momento en el cual nuestros padres, como era fin de semana, nos dejaban ver el “Un, dos, tres… responda otra vez”, aquel histórico programa concurso dirigido y creado por Narciso Ibáñez Serrador (para los amigos Chicho).
Pero a nosotros no nos interesan ni el concurso, ni Chicho, nos interesa aquel personaje con forma de pera (o de ameba, todo depende desde donde se mire) y color rosa que tomo el nombre de Chollo.
El Chollo, a pesar de su corta vida en televisión, tan solo dos años, llegó a ser la mascota con más personalidad y carisma de la televisión, no en vano en 1984 sustituía a la bota Botilde que anteriormente había sustituido a la calabaza Ruperta. Esta mascota presidio el famoso concurso durante dos temporadas, la cuarta y la quinta, desapareciendo de nuestras pantallas el 28 de marzo de 1986.
El Chollo vestía sombrero de copa, calzas de media pierna, bastón y capa, siempre estaba sonriente y contento, y fue la primera mascota positiva del “Un, dos, tres”, ya que si durante la subasta los concursantes terminaban eligiendo el Chollo, éstos podían quedarse con cualquiera de los premios que habían salido durante la subasta, vamos que el Chollo era el chollo que todo concursante anhelaba y quería ganar, claro que también existía la versión contrapuesta, el Antichollo, y si los concursantes terminaban quedándose con él, volvían a su casa con las manos vacías. Ciertamente era bastante emocionante cuando al final los concursantes no sabían si el sobre ganador encerraba al Chollo o al Antichollo, porque durante el concurso podían salir el uno, el otro o los dos en forma de juego.
A la famosa mascota siempre le gustó una de mis azafatas preferidas del “Un, dos, tres”, Silvia Marsó, y es que solo con verla se te levantaba el ánimo y las ganas de ver el siguiente programa.
La verdad es que desde aquella época pocos concursos han despertado la expectación que despertaba en todo el mundo el “Un, dos, tres… responda otra vez”, un programa concurso lleno de premios y regalos pero que simultáneamente era también un programa de variedades, muy entretenido y divertido. Después del Chollo, Bigote Arrocet era mi favorito.
0 comentarios:
Publicar un comentario